El presente blog que viene abajo no tiene nada que no haya en otros blogs literarios, simplemente retomo eso que le dio de comer a tantos otros escritores fracasados, hablar de las mujeres que no consiguen o de las otras, las que se fueron. Como capitán, que huye, en franca retirada de las relaciones, me permito contar secretos de diván, escabrosos relatos de cama y de hoteles para que sucumban de pavor esas otras desconocidas que supieron ser garabato de mi muñeca, bueno, no son todas las que yo hubiera querido así que voy evitar nombrarlas para que no quede en evidencia mi falla. Pero no sólo de mujeres vivimos, así que también hay otros temas y otros formatos, tenemos cortometrajes, tenemos novelas, tenemos cuentos, bueno, cuentos no, chinos tampoco, pero hay intersecciones y cartas, fotografías re contra artísticas y otras en la que sólo aparece mi cara. Bueno, el resto del blog es mejor que el prólogo, no lo prometo pero créame.

23 de enero de 2014

olvidá y recordá.

Sociedad,
muertos en vida,
ególatras,
codiciosos
sin sueños,
anhelan materiales,
desechan el arte,
el amor,
el fuego,
el presente,
aburridos futuristas,
mueren en vida
peleando por el color de su ataúd.

Vos no,
vos
no mueras nunca,
no dejes de soñar,
viajá por el mundo,
no dejes de crear,
de trazar los cálidos colores,
de ser una barcaza en el océano,
que la oscura sociedad no se lleve
tu juventud,
que los años no te conviertan en una bruja aburrida,
olvidá y recordá.
No guíes a tu corazón,
que él te lleve al galope,
 dejá,
que la muerte te sorprenda
con una sonrisa,

que hasta ella sienta pena de llevarte.

10 de enero de 2014

Perenne

En la perenne
oscuridad, el rayo
hace la luz,
algún dios se asoma
y exhorta,
la vida,
descanso del universo,
materia en muerte otra vez.

La rutina es más allá,
todo resume
en tres oportunidades,
deshechas,
volver jamás,
quizás mañana.

Rumbos añejos.

Los besos no son otra vez,
siempre los últimos
sobre novedosos
labios exteriores en cualquier madrugada
en taxi,
la excusa para amar,
volver a viajar.

Cumplir con el exhorto,
en palabras barrocas,

encriptadas.

Estallidos,
ruidos,
finales de comienzos.

Donde andás?