La
galaxia,
el mundo
entero,
termina
en la estratosfera,
en
las muertes por amor incumplidas,
en
los llantos que no se repiten,
en
tomar la mano,
soltarla.
Todo
cayó.
Ocho
días,
ocho
meses,
ocho
años,
el
mundo se abanicó de impaciencia,
su
preso político y común
fue
a dar
con
los inocentes,
los
abandonados del sistema.
Los
amores quedaron tras las rejas,
divididos,
tal
cual la vida,
escuchan
el
pedido de auxilio,
grito
de espanto,
dolor
de existencia,
que
no
cabe en una frase.
Abrazo
al fuego,
calor sobreimpreso
del
sentido carente
una
palabra sobre otra,
piernas,
berrinches
lunares,
sal,
sol,
dibujos,
pasión,
recreo,
silbido,
sueños,
sexo,
juventud,
marihuana,
incoherencia,
viaje,
caída,
arena,
estrellas.
Eterna
y apreciada soledad,
apenas
comienza el viaje en tu voz,
desafiemos el poder,
a la sociedad,
al cielo,
a la
galaxia.