El presente blog que viene abajo no tiene nada que no haya en otros blogs literarios, simplemente retomo eso que le dio de comer a tantos otros escritores fracasados, hablar de las mujeres que no consiguen o de las otras, las que se fueron. Como capitán, que huye, en franca retirada de las relaciones, me permito contar secretos de diván, escabrosos relatos de cama y de hoteles para que sucumban de pavor esas otras desconocidas que supieron ser garabato de mi muñeca, bueno, no son todas las que yo hubiera querido así que voy evitar nombrarlas para que no quede en evidencia mi falla. Pero no sólo de mujeres vivimos, así que también hay otros temas y otros formatos, tenemos cortometrajes, tenemos novelas, tenemos cuentos, bueno, cuentos no, chinos tampoco, pero hay intersecciones y cartas, fotografías re contra artísticas y otras en la que sólo aparece mi cara. Bueno, el resto del blog es mejor que el prólogo, no lo prometo pero créame.

19 de junio de 2008

recuerdo en celuloide


Ella murió, pensó

el día que no la vio,

otra vez, sin falta,

el escribidor

se llenó de recuerdos

al imaginar ver

aquella contrastada imagen

subexpuesta en el papel,

recuerda no recordar la imagen de ella,

pálida y rubia,

con una sonrisa lisa y liviana,

con mueca de sentirse a gusto,

él conoce las descripciones

pero no logra ver esa figura,

negó con su cabeza,

pensó imposibles,

buscó en su memoria desprolija,

y nuevamente no hubo nada más

que esa pictórica imagen en palabras,

ningún movimiento de ella,

siempre fija en su mente,

estática,

sonriente,

feliz con él

que destilaba sus engaños,

ella murió en él

que rebusca

en cajones,

armarios

y discos

tratando de hallar

ese recuerdo en celuloide,

nada,

se fue,

no hay más,

y por eso resulta difícil recordar,

escribidor desmemoriado,

amante de los tiempos

ajenos al ayer

y al mañana,

favoritista del hoy,

ese hoy que,

escribidor querido,

te cubre de luto

el deseo de volver a transformar

esas palabras en imágenes que te cubran de sufrimiento

El escribidor lloró

por el destierro fotográfico

del recuerdo de ella.

Ella.

10 de junio de 2008

vos... todos mis yo


Esto que sigue a continuación es algo que me sucedió a mi, bueno, en realidad te sucedió a vos que estás leyendo, o sea, el yo escribiendo soy el yo (vos) leyendo, es confuso pero no tanto ya que esto que me ocurre a mi te ocurrió a vos y un día te pusiste a escribirlo. Y ahora lo estoy leyendo, ahora que se que soy un recuerdo olvidado por cos (yo). Soy ese personaje que sos vos, pero mas yo que me olvido de lo que fui, de ese perdido en un sueño tembloroso que tuvimos (que tuve, que tuviste y que no recordás porque estás lejos en el tiempo), no lo recordás pero yo, adelantado a tu tiempo, adelantado (a vos que sos yo) recuerdo mejor lo que nunca sucedió pero que tanto me gusta decir que si, que sucedió. Así juego con vos, que estás leyendo, mientras juego conmigo, que estoy contando, no dudas. Vos (todos ustedes) soy yo.

5 de junio de 2008

olvidada, perdida y recuperada


La realidad se hace presente

cuando vive del pasado,

imágenes pérdidas

que quedaron cautivas

cuando no supo despegarlas de su retina.

Pequeñas fotografías

con una fecha indicada, sin ganas de ser recordada,

olvidada, perdida y recuperada

en ese soplo memorial,

esa chispa que despierta en su mente,

la que nunca olvida,

se sintió abandonado,

en una soledad de esas que van en serio,

miró su reloj,

a quien recurrir tan tarde

si sólo quería a ella

que juega en su memoria,

a ella, que invade cada tanto, su cordura,

desmenuzándola

en aquella locura,

silenciosa,

que erizó su piel

en cada imagen

que se pierde

y se vuelve a repetir,

el pasado regresa,

siendo el águila

que devora su hígado,

recién regenerado,

devora,

una y otra vez…

Donde andás?