El presente blog que viene abajo no tiene nada que no haya en otros blogs literarios, simplemente retomo eso que le dio de comer a tantos otros escritores fracasados, hablar de las mujeres que no consiguen o de las otras, las que se fueron. Como capitán, que huye, en franca retirada de las relaciones, me permito contar secretos de diván, escabrosos relatos de cama y de hoteles para que sucumban de pavor esas otras desconocidas que supieron ser garabato de mi muñeca, bueno, no son todas las que yo hubiera querido así que voy evitar nombrarlas para que no quede en evidencia mi falla. Pero no sólo de mujeres vivimos, así que también hay otros temas y otros formatos, tenemos cortometrajes, tenemos novelas, tenemos cuentos, bueno, cuentos no, chinos tampoco, pero hay intersecciones y cartas, fotografías re contra artísticas y otras en la que sólo aparece mi cara. Bueno, el resto del blog es mejor que el prólogo, no lo prometo pero créame.

4 de mayo de 2007

Carta número 11



25 de Octubre
Así nomás de repente y sin prepararme, sin previo aviso, sin siquiera insinuar algo, sin dignarte a decírmelo frente a frente, sin que pueda ver las palabras salir de tus labios, sin que pueda oír las palabras, sin tiempo para reaccionar y para llorar. Me mentiste tanto y ni siquiera golpeaste mi puerta para decírmelo, una llamada por teléfono hubiera sido una crueldad también pero al menos mas digno a la hora de decirme todas esas cosas que escribiste, a la hora de echarme de tu amor.
Tan solo unas preguntas: ¿Por qué me hacés esto? ¿por qué me engañaste de esa forma? ¿por qué me dejás? ¿tan cruel podés ser justo en este momento, en el que no me siento muy bien, en el que estoy muy solo y muy mal?
Ya perdí todo, no me queda nada. Perdí mi trabajo por vos, por desvelarme siempre pensando en vos. Pensando en lo que estarías haciendo mientras yo dormía. Pensaba: ¿con quién estarías? ¿con quién me estará engañando? También por otra parte te defendía: salió tarde de trabajar, tiene sueño y por eso no llama, tal vez lo haga mañana, todo va a estar bien no tengo de que preocuparme. Se me pasaban las horas y a la hora de la verdad dormía (como casi siempre con o sin vos). Dormía y no trabajaba, muchos días estuve así hasta que prescindieron de mis servicios en el trabajo. "Esto no da para mas, Ismael, no es solo por faltar sino que las pocas veces que venís a trabajar se nota que ya hasta perdiste la simpatía por tu trabajo, cosa que siempre te jugó a favor. Lo siento hermano pero te tengo que echar". No los puedo culpar, no debe ser normal que te peleés con el proveedor de trabajo, el odontólogo, porque te manda a hacer una corrección de prótesis.
Ya vez, perdí mi trabajo y por ende mi casa. Vivo nuevamente en casa de mis padres, y ya de por si esto es humillante. Volver a pedirles un techo a esta altura del partido, en el que ya estaba muy bien asentado. No sé que hacer, pero si se que algo tengo que hacer y ya, pronto, ahora.
Estoy tratando de soportar, de aguantar esta fiebre que sube y sube, estos empujones que me están cansando y me quieren a obligar a hacer un desastre, una locura que no soy capaz de describirte con palabras, tan solo con hechos. No sé que hacer con ellos, me están volviendo loco.
Mediante esto solo quiero que sepas una cosa, pase lo que pase siempre te voy a llevar en mi corazón. No habrá dolor que me haga olvidar de vos, este en el lugar que este siempre te voy a recordar por lo que fuiste el día que te conocí (ese tiempo antes de conocerte y el de después, cuando te conocí). No me pidas que te recuerde por lo que sos ahora, seria otra ingratitud inexplicable de tu parte, porque ahora sos un deshecho humano, sos la razón de mi odio que al fin me alcanzo, después muchos intentos, sos el desastre de mi vida, a la que tengo que darle una solución.
Estos próximos días, en uno de ellos, vas a sentir, elevado a la mil, todo el dolor que me hiciste sentir con tus risas engañosas y tus llantos usados para seducir a mi lado susceptible, para atosigarme y hacerme pensar que era yo el errado. Sin saber que estuviste jugando conmigo y con mi forma de querer, de quererte. Todo el amor que te di, mas el que trate de darte, te va a volver otra vez pero en forma de castigo, de crueldad.
Creo que con eso ya esta todo dicho, no tengo nada mas que decirte. Solo un feliz día de los fieles difuntos, al que pronto me unirán, por fin.
Que lástima dejarme así. Que desgracia también.
ISMAEL

No hay comentarios.:

Donde andás?